Si tu aspiradora pierde eficiencia o empieza a oler mal, es señal de que necesita mantenimiento. Estas son las tareas de mantenimiento más comunes de una aspiradora: Consulte su manual para obtener detalles sobre cómo acceder a cada pieza.
Contenido
1. Limpiar la barra del cepillo.
Un cepillo obstruido con pelo o pelaje no hace su trabajo correctamente, lo que le exige más trabajo al requerir varias pasadas para recoger el polvo y la suciedad. Además, un cepillo obstruido ejerce más presión sobre la correa y el motor de la aspiradora, lo que acorta su vida útil. Por tanto, es fundamental mantenerlo limpio.
Desenchufe (o retire la batería) y dé la vuelta a la aspiradora. Con unas tijeras, corte con cuidado los hilos y pelos enredados: es mejor hacer esto que arrancarlos. Tenga cuidado de no cortar ningún pelo. Es posible que haya hendiduras a lo largo del cepillo que le permitirán empujar las tijeras sin dañar las cerdas. Si hay suciedad o fibras en las cerdas, puedes limpiar el cepillo con agua tibia. Asegúrese de que esté completamente seco antes de colocarlo en la aspiradora.
Si el cepillo no gira en absoluto o gira muy lentamente incluso después de desatascarlo por completo, es posible que necesite una correa nueva. Del mismo modo, si las cerdas están dañadas o muy dobladas, sustituir el cepillo suele ser más rentable que sustituir toda la máquina.
2. Lavar y/o reemplazar filtros
Mantener el filtro limpio puede ser una tarea ardua, pero es fundamental que la aspiradora pueda aspirar el polvo correctamente. Comprueba dónde está ubicado el filtro de tu aspiradora y si es lavable.
Si es posible, saque la aspiradora antes de retirarla. Golpéelo firmemente para eliminar el exceso de polvo. De regreso al interior, si es lavable, páselo por agua caliente para desalojar el polvo restante y déjelo secar por completo antes de volver a armarlo.
Para los filtros que no son lavables, retire el polvo del exterior antes de reemplazarlos y reemplácelos cuando el filtro muestre signos evidentes de desgaste. Su manual debe indicarle con qué frecuencia reemplazar los filtros.
3. Compruebe si hay obstrucciones
Si su aspiradora pierde succión, una de las causas más probables es una obstrucción. Esto no sólo puede afectar su poder de limpieza sino que también puede ejercer presión sobre el motor. Desenchufe o retire la batería antes de manipularla, luego verifique dónde está la obstrucción.
Los culpables generalmente se encuentran en la manguera, pero asegúrese de revisar el cepillo, los accesorios y la entrada al cuerpo principal de la aspiradora. Incluso algo tan pequeño como una horquilla puede causar una obstrucción, así que lleve una linterna para encontrarlo.
4. Vacíelo con frecuencia
Una aspiradora llena es una máquina infeliz. Es aconsejable cambiar la bolsa periódicamente en los modelos con bolsa, resistir la tentación de reutilizar las bolsas y asegurarse de que esté bien sujeta cada vez.
Además, no espere hasta que los contenedores sin bolsas estén llenos. Vaciarla dos tercios del recorrido es un buen momento, antes de que empieces a notar una caída en la succión, pero después de cada limpieza, tu aspiradora seguirá ronroneando.
5. Lava la basura
No vaciar la aspiradora con suficiente frecuencia puede provocar olores desagradables cuando la usas. Si el olor persiste después de vaciarlo, limpie el contenedor para eliminarlo. Para los modelos en bolsa, una vez desenchufados, limpie la cavidad con agua tibia y jabón y déjela secar por completo.
Para aspiradoras sin bolsa, separe el tanque y retire los filtros, luego lave el tanque y déjelo secar por completo. Si los olores persisten, limpie las piezas de su aspiradora con una solución de vinagre blanco y agua para desinfectarlas. También puedes intentar aspirar bicarbonato de sodio del suelo.
Al realizar estos pequeños trabajos de limpieza, su aspiradora no sólo debería funcionar por más tiempo, sino que sus pisos también serán más fáciles de limpiar.
La limpieza regular de tu aspiradora es necesaria para mantener su eficacia y evitar malos olores. Algunas tareas comunes incluyen limpiar la barra del cepillo para evitar obstrucciones, lavar y reemplazar los filtros para mantener la succión, comprobar y eliminar obstrucciones en mangueras y accesorios, vaciar la aspiradora con frecuencia para evitar problemas de succión, y lavar el contenedor o bolsa para evitar olores desagradables. Estos pequeños trabajos de limpieza prolongarán la vida útil de tu aspiradora y harán que mantener tus pisos limpios sea más fácil y efectivo.
0 comentarios